Cambio de profesión, y no precisamente para cantar hip hop como el intérprete de música tradicional cubana Eliades Ochoa, si no para dejar a un lado el tono de periodista inquisidor, al menos por el tiempo que dure este comentario, y convertirme en un sagüero más, cuando me pregunto: cómo se celebrará el aniversario 200 de la fundación de la Villa de la Inmaculada Concepción de Sagua la Grande.
El 8 de diciembre está a la vuelta de la esquina y como buen hijo de esta tierra, me preocupa el avance en el programa o plan de acciones diseñado para agasajar a la ciudad en su bicentenario.
Si bien es cierto que se puede apreciar un mejor rostro en algunos edificios a juzgar por las brochas que corren sobre ellos, si bien es cierto que el presupuesto no es espléndido para subsanar todo aquello que quisiéramos, también es cierto que a sólo 23 días de la esperada fecha, en la Villa del Undoso no se respiran aires de cumpleaños, o al menos, no como muchos soñamos cuando desde tiempos atrás pensábamos en el trascendental momento.
Según fuentes consultadas, existe un bien pensado programa gubernamental, las empresas e instituciones del territorio han realizado algunas iniciativas en sus correspondientes dependencias y los medios de comunicación locales, de a poco, han abordado el tema ya sea de manera informativa o promocional.
Pero a pesar de ello, o junto a todo ello, como ciudadano de a pie, y de “botella”, creo que lo realizado hasta ahora y lo proyectado es insuficiente, o simplemente, más de lo mismo. Y me atrevo a presagiar que para muchos habitantes de esta localidad no hay nada más ajeno que el bicentenario de la fundación de Sagua.
Sirva esta visión de caminante para alcanzar la motivación necesaria, para lograr el éxito en cada tarea, para empeñar todas nuestras fuerzas en la recta final, para no parecernos en nada a los sagüeros indolentes que vivieron el centenario.
Ojalá el contexto sea más convincente el 8 de diciembre. Ojalá esté equivocado.
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El 8 de diciembre está a la vuelta de la esquina y como buen hijo de esta tierra, me preocupa el avance en el programa o plan de acciones diseñado para agasajar a la ciudad en su bicentenario.
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| Valla situada a la entrada de la ciudad desde Santa Clara. Foto: Bárbara Fortes. |
Si bien es cierto que se puede apreciar un mejor rostro en algunos edificios a juzgar por las brochas que corren sobre ellos, si bien es cierto que el presupuesto no es espléndido para subsanar todo aquello que quisiéramos, también es cierto que a sólo 23 días de la esperada fecha, en la Villa del Undoso no se respiran aires de cumpleaños, o al menos, no como muchos soñamos cuando desde tiempos atrás pensábamos en el trascendental momento.
Según fuentes consultadas, existe un bien pensado programa gubernamental, las empresas e instituciones del territorio han realizado algunas iniciativas en sus correspondientes dependencias y los medios de comunicación locales, de a poco, han abordado el tema ya sea de manera informativa o promocional.
Pero a pesar de ello, o junto a todo ello, como ciudadano de a pie, y de “botella”, creo que lo realizado hasta ahora y lo proyectado es insuficiente, o simplemente, más de lo mismo. Y me atrevo a presagiar que para muchos habitantes de esta localidad no hay nada más ajeno que el bicentenario de la fundación de Sagua.
Sirva esta visión de caminante para alcanzar la motivación necesaria, para lograr el éxito en cada tarea, para empeñar todas nuestras fuerzas en la recta final, para no parecernos en nada a los sagüeros indolentes que vivieron el centenario.
Ojalá el contexto sea más convincente el 8 de diciembre. Ojalá esté equivocado.
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De acuerdo con la apreciación de Maykel González, faltó en la valla publicitaria el detalle importante de Monumento nacional y, a mi juicio, sobran muchos otros. Ahí se tiene un ejemplo de una valla que no cumple con los principios básicos de ese soporte de comunicación.
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